Introducción
La fase III del programa de rehabilitación cardíaca se enfoca en el mantenimiento de los beneficios obtenidos en las fases anteriores y en la prevención de complicaciones a largo plazo. El seguimiento en fase III es fundamental para garantizar la adherencia a las recomendaciones de estilo de vida y el uso de medicamentos y para detectar y tratar tempranamente cualquier complicación cardiovascular.
objetivos
Nuestro objetivo es conocer la adherencia en fase III de pacientes de bajo riesgo sometidos a un programa de entrenamiento mixto (hospitalario + domiciliario).
Métodos
Se realizó seguimiento telefónico a 35 pacientes de bajo riesgo, a los 6 meses tras completar fase II de un programa de entrenamiento mixto mediante la aplicación de un cuestionario prediseñado, donde se valoraba el estado clínico, control de factores de riesgo y adherencia al entrenamiento.
resultados
Se incluyen a 35 pacientes con edad media de 58,5±6, 91,4% varones. El motivo de inclusión fue tras SCA en el 80% y cardiopatía isquémica estable revascularizada en el 20%. El 28,6% eran diabéticos, el 82,9% con hipertensión, el 88,6% hiperlipemia, antecedentes de tabaquismo en el 65,7%, un 74,3% padecía de sobrepeso y el 20% obesidad. El 68,6% no habían presentado dolor torácico y sólo el 14,3% había usado nitratos sl para su control. El 97,1% no había precisado acudir a urgencias tras el alta del programa. El 62,9% reconoce que ha perdido peso y el 14,3% seguía fumando. Un 20% de los pacientes reconoce que se olvida la medicación alguna vez, pero ninguno la abandonó. El 91,4% continúa entrenado mediante caminatas el 68,6% y bicicleta 22,8%. Solo el 51,4% realizaba calentamiento y el 51,4% utilizaba la FC de entrenamiento. El tratamiento hipolipemiante se modificó en el 14,3%, un 2,9% mediante introducción de IPCSK9 y un 11,4% aumentando dosis de estatinas.
conclusiones
En conclusión, el seguimiento telefónico a los pacientes de bajo riesgo sometidos a un programa de rehabilitación cardíaca mixto en fase III demostró una buena adherencia al entrenamiento, así como al uso de medicamentos para controlar los factores de riesgo.