Introducción
La insuficiencia cardíaca constituye una de las principales causas de hospitalización en adultos mayores, con importantes implicaciones clínicas y sociales. Diversas estrategias han sido desarrolladas para mejorar su manejo, entre ellas, las intervenciones grupales que permiten un abordaje educativo y psicosocial integral. La participación de los pacientes ha estado motivada por la necesidad de mejorar su calidad de vida y controlar la progresión de la enfermedad.
objetivos
Describir las características clínicas y demográficas de los pacientes con insuficiencia cardíaca que han participado en una intervención grupal, así como analizar los resultados obtenidos tras su implementación.
Métodos
Se ha realizado un estudio observacional descriptivo sobre una muestra de 34 pacientes atendidos durante un año. Los participantes han sido agrupados según edad, presencia de depresión (Yesavage <6) y existencia de cuidador. Se han utilizado como instrumentos la escala Morisky Green para valorar la adherencia terapéutica y el cuestionario Minnesota para la calidad de vida. Los datos han sido analizados mediante estadística descriptiva simple.
resultados
La edad media ha sido de 71,4 años, con predominio del sexo masculino. El 61,7 % ha presentado fracción de eyección reducida y clase funcional II (NYHA). Todos los pacientes han mostrado adherencia completa al tratamiento farmacológico (Morisky Green = 0) y la mayoría ha obtenido puntuaciones inferiores a 50 en el cuestionario de Minnesota, indicando una buena percepción de calidad de vida. Se ha observado una elevada presencia de comorbilidades como diabetes, hipertensión, obesidad y enfermedad renal crónica. La mayoría ha pertenecido al grupo de 60-80 años, sin depresión ni cuidador.
conclusiones
La intervención grupal ha ofrecido un espacio efectivo para el aprendizaje y el acompañamiento en el manejo de la insuficiencia cardíaca, favoreciendo la adherencia y mejorando la calidad de vida. La identificación de las características de los participantes ha permitido adaptar mejor las sesiones. Se requieren estudios adicionales que evalúen el impacto a largo plazo y permitan definir modelos replicables a gran escala.